Bogotá

viernes, 3 de octubre de 2008

Hacia un dia asturiano, y eso era extraño, porque estabamos en el puro trópico.. sin embargo habia viento y llovia, y a mi me encantaba, me gustaba sentirme entre tanta gente y con el orbayu de la tierrina.
No me importaba mojarme, siempre me gusto la lluvia. Y a pesar de las muchas advertencias -"¡Vas a coger gripa, esta lluvia es terrible!" no cogi gripa al fin, y recuerdo mas dias bajo la lluvia...si recuerdo otros, si..

Iba pasando por las calles e iba recordando: la septima, la candelaria...
Luego la calle llena de gente terminó en una plaza y lo vi: miles de palomas, mucha gente y en el centro su estatua.

Alli me di cuenta de que recordaba sueños, de hacia mucho tiempo. Y alli estaba en la plaza simon Bolivar.

Y me di cuenta de que estaba en Bogotá, cumpliendo un sueño impensable.

Y que quizas no lo estaba aprovechando como tal...se deberia de poder ensayar la realidad para que cuando llegue uno la aproveche mejor.

Habia llegado alli de la manera mas extraña, sin sueños compartidos y con sueños improvisados una semana antes. Eso fue duro, y dificil, dificil antes y dificil allá.

Alli me sente en la escalera a mirar, la gente que pasaba, la gente que se acercaba.

Y me senti muy feliz, como en casa.

Y me enamore de esa ciudad de locura, donde uno desea perderse todo el rato y se siente perdido sin esperarlo.